Fairy Tales Don't Exist - Capitulo 6

–      ¿Cómo estás? – Jacky, se acerco a sentarse junto a mí, había faltado el día anterior a la escuela, no tenía ganas de ir, me la pase acostada todo el día con las cortinas cerradas, me desperté en la tarde comí un poco de crema de chocolate y después me volví a dormir hasta el día siguiente, llegue a la escuela completamente demacrada, no tenía nada de ganas de caminar, era como un zombie caminando por los pasillo, entre al salón de clases unos 15 minutos antes de los demás y me recosté en el pupitre y Jacky se sentó al lado, dijo dos palabras y me levante con unos cabellos en la cara, tenía los ojos entrecerrados y solo la mire un poco.–      ¿Mande? – Ella me miro, me tomo de la cara y me sacudió un poco, me quito el cabello de la cara y se para detrás de mí para hacerme una coleta. – No… déjame – Ella se rio lo que provoco mi risa igual y se sentó de nuevo.
–      No  viniste ayer, conociéndote te la pasaste durmiendo todo el día, y comiendo ¿Es por Zayn? – Estaba a punto de contestarle, cuando se escucho la campana, nuestros compañeros entraron y al final de ellos venía Niall, con su mochila al hombro, me miro por un minuto y desvió rápido la mirada sin hacer ninguna expresión, como si hubiera visto solo un lugar vacio, yo baje la mirada y trague seco.
–      No… Es por…
–      ¿Niall? – Al momento de pronunciar su nombre volteé a verla rápido.–      Si.–      Pues… No sé que haya pasado, pero te conozco y estás haciendo esto, por lo que paso con Zayn; te has cerrado por completo. En serio crees que todo el mundo te hará daño y no es así, Sky… – Me miro preocupada, estaba a punto de soltar el llanto cuando el maestro entro, desvié la mirada muy rápido y volteé hacia la ventana al lado de nosotras, Jacky solo se me quedo mirando un rato y después se sentó bien en su silla.

Ya había terminado la clase, yo guarde mis libros desde cinco minutos antes y en el momento en que sonó la campana, me levante tan rápido como pude y camine hacia la puerta, no quería darle la cara a nadie y no podía dejar que alguien me viera llorar, sería lo peor; estaba saliendo cuando de pronto alguien choco conmigo.  

–      Oh, lo siento… – El chico me miro y frunció el seño preocupado.

–      Está bien… No hay problema – Era Harry, yo levantaba mi mochila que había salido volando dejando caer todo de ella, en esos momentos estaba que no podía más.

–      Déjame ayudarte – Cuando se estaba agachando para recoger mis hojas, yo las tomé muy rápido y lo mire muy enojada.

–      ¡Te dije que no hay problema! – Le dije gritando. El me miro sorprendido por mi tono de voz, estaba a punto de hablar cuando lo interrumpí. – Olvídalo… – Camine hacia el patio de la escuela.

“Vaya parece que alguien no te soporta”. Se escuchaban las voces burlonas de los chicos que iban con él, yo solo refunfuñe y continué caminando apretando los puños, tiré mi mochila en el pasto y me acosté boca arriba sentía hirviendo la cara, inclusive respirar era muy profundo y pesado, sentía que quería llorar, gritar, todo en ese momento. – ¿Qué me sucede? – Lleve mis manos a mi cara y solté un gruñido. – ¿Por qué hago todo esto? Mis amigos no lo merecen. – Pensé – Tal vez, Jacky tiene razón… – Me levante con mi cabello de lado y recargando mis manos en el suelo – Tal vez, es momento de dejar ir todo este odio y rencor… No, más bien no debo desquitarme con los demás… Tal vez deba de olvidar… Pero no perdonar, no me creo capaz de eso, no, perdonar no podré hacerlo… – Me volví a acostar llevando mi brazo a mis ojos para taparme del sol, respire profundo y me relaje un poco, pensando – Olvidar si, perdonar no.

–      Sky…– Oí una voz a lo lejos, estaba despertando apenas, me había quedado dormida, sentía que despertaba después de no haber dormido toda una semana, me sentía relajada, me sentía mejor. Abrí los ojos un poco aún en el pasto, Ian me veía sonriendo, llego hasta a mí y se acostó a un lado mío, yo sonreí y le di un codazo – Hey, muchacho.

–      Jacky, me dijo que estabas…

–      No, ya no más, estoy bien es solo que…

–      ¿Tenias que pensar las cosas? – Me miro sonriendo.

–      Si… – Le dije sonriendo más, el siempre sabía que decir, siempre sabía lo que pensaba, por algo era mi mejor amigo.

Los dos estuvimos un rato acostados en el pasto, viendo las nubes, riendo y demás la estábamos pasando bien, yo había dormido todas las clases restantes no había entrado más que solo a una según Ian, el supo inmediatamente donde buscar, ya había pasado la última hora y teníamos que llegar rápido a la escuela para salir, si es que no queríamos quedarnos encerrados, nos pasamos todo el camino a casa riendo, bromeando y demás. Después de haber tenido cualquier problema era algo normal que siempre Ian fuera el que me animara, el me comprendía completamente, era como el hermano mayor que todas quisieran tener.

Estábamos llegando a el parque a unas casas de la mía, seguíamos caminando ya casi despidiéndonos, yo baje la mirada para  mirar la grava que pisaba y seguía sonriendo, Ian me dio un leve codazo, lo mire y con la vista señalo a el árbol del parque, ahí estaba sentado Niall que al vernos se había levantado y estaba sacudiéndose la tierra, yo sonreí tranquila y con solo mirar a Ian él supo que estaba bien.

–      Bien, nos vemos mañana en la escuela… – Me miro se despidió de un beso y miro a Niall saludándolo con la mano, dio vuelta y se fue por donde llegamos. Niall avanzo hacia mí y yo no dije nada solo lo mire moviendo leve la cabeza de manera de saludo.

–      Espero sepas que no me doy por vencido tan fácilmente y… quiero ser tú amigo, yo se que tú no lo deseas… solo quiero saber ¿Por qué? Es decir, ¿Me odias… – Justo cuando dijo eso mis ojos se abrieron mucho y tuve que hablar.

–      Quiero que seamos amigos… –Niall se había quedado en silencio– Perdón si te hice sentir mal antes… No te odio, eso no… no podría ser posible – Al decir esto, mis mejillas estaban ardiendo y cuando mire a Niall estaba sonriendo muy tiernamente– Es decir… No te conozco lo suficiente para decir eso… – El solo sonrío y me miro–

–      Bien… Empecemos de nuevo… ¡Hola! Mi nombre es Niall Horan, estudio en la misma escuela que tú y soy nuevo. – El sonrío y extendió la mano, yo la tome y sonreí de la misma manera…

–      Mucho gusto, Niall… – En verdad que si sentía eso gusto… Los dos nos miramos sonriendo y yo bajé la mirada. – Ah… Iré a trabajar, en estos momentos… ¿Quieres acompañarme? Podríamos empezar esto... mejor.

–      Claro… No sabía que trabajaras – Dijo mientras los dos comenzamos a caminar hacia el centro.

–      No lo hacía, pero me inscribí a unos cursos de actuación y si quedo en él, tendré que pagarlos, entonces es mejor que empiece a ganar el dinero – Sonreí.

–      ¿Te gusta actuar?

–      ¿Qué si me gusta? – Lo miré abriendo los ojos – ¡LO AMO! Es mi vida desde hace ya varios, años ¿sabes? El teatro siempre ha sido para mí lo mejor de mi vida, es decir, es como vivir diferentes vidas, conoces historias, conoces gente nueva, gente que no existe… Es lo mejor para mí. –Le dije mientras mis ojos brillaban, el solo me miraba sonriendo un poco.

–      Espero algún día poder verte actuar, estoy seguro de que eres muy buena…

–      ¿En serio?

–      Claro, tienes ese toque artístico – Lo mire sonriendo emocionada y algo ruborizada, no me había visto actuar pero mi adulaba como si de verdad confiara en mi.

–      ¡Gracias! Serás al primero que invite cuando tenga un papel en mi curso – Sonreí y me detuve frente a una cafetería – Es aquí… – Le dije mientras caminábamos hacia la puerta, al entrar había estantes de libros pequeños, una barra con asientos altos y mesas redondas con gente tomando café o batidos, un hombre robusto y con una sonrisa, me saludo y yo le devolví el saludo.

–      Me alegro que hayas llegado… – Miro el reloj de la pared y volvió a sonreír – Vaya, que eres puntual – Me entrego un mandil con el logo del lugar y entre a la barra, Niall se sentó en los bancos altos y miro todo el lugar.

–      No había venido aquí.

–      Cierto… eres nuevo. – Le dije mientras me ponía frente a él detrás de la barra, una chica a dos asientos de él se sentó y me acerque a tomar su pedido. – ¿Qué dices? ¿Me ayudaras? –Lo mire mientras anotaba el pedido y sonreía.

–      A tener trabajo tal vez, porque tengo hambre –Lo mire y sonreí.

Ya era de noche, el trabajo había terminado, Niall no se había ido en todo el día, él estuvo conmigo haciéndome sonreír, era mi primer día y ya había sido reprendida por el dueño, por tardar con los pedidos, pero la presencia de Niall me hizo relajarme más y divertirme más, me despedí del dueño y Niall camino junto hacia la casa hablando de más cosas sin sentido y justo en la esquina del parque nos despedimos. 

–      Bueno… Gracias, por estar en el trabajo conmigo – Le dije sonriendo.–      No hay de que, fue uno de los mejores días, desde que llegue aquí –Dijo sonriendo con timidez–
–      Bien, entonces tal vez ¿Mañana quisieras ir otra vez? –Le dije algo animada.–      Lo siento… – Había ido muy rápido… ¿Qué acaso le estaba pidiendo una cita?, Dios, tal vez el está pensando algo mal de mi.–      Es decir… ¡Para no aburrirme en el trabajo! No esta de mal compañía, pero no te preocupes, puedo decirle a Jacky… Am, perdón –Le dije bajando la mirada y con el corazón latiendo.–      Lo que pasa es que mañana tengo practica de Americano después de clases, pero de no ser así, iría sin que tú me lo pidieras –Dijo riendo, lo que hizo que lo mirara aliviada y sonriendo. – Pero nos podemos ver en la escuela mañana, más te vale hablarme.–      Tal vez… No lo se –Dije riendo mientras empezaba a caminar hacia mi casa.–      Pues entonces lo aré yo… Adiós –Me dijo, volteé a verlo y sonreí sin decir nada.

Camine unos metros hasta mi casa, entre y cerré la puerta recargándome en ella y sonriendo, mi madre estaba en la cocina dándole de cenar a Kurt, yo entre y los salude, fui muy amable y con esa sonrisa aún en mi boca, ellos me miraron extrañados y después de hablar con mi mamá sobre mi primer día, subí a mi habitación… Puse algo de música y me puse mi pijama. 

–      Casi olvido decírtelo. – Entro mi madre a mi cuarto, yo la mire con la misma sonrisa y bajé mi música.–      ¿Qué pasa?–      Ian, estuvo llamando toda la tarde, pero le dije que habías ido a trabajar, tal vez debas llamarlo. – Me dijo amable.–      Si, lo aré mamá, gracias – Mi madre salió y tomé el teléfono, marque y espere…–      ¿Hola? – Era la voz de Ian.–      ¿Me estuviste buscando? Hoy fue mi primer día en el trabajo, te lo dije tonto. – Una risa sonó del otro lado.–      Lo olvide, llegue a casa y solo quería saber si estabas bien, después de haber estado comportándote así… Solo quería estar seguro.–      Estuve bien, cuando te fuiste aclare las cosas con Niall y él me acompaño al trabajo… –Le dije mientras me tiraba en mi cama.–      Oh… Lo hubiera hecho yo, pero olvide lo de tú primer día…–      No te preocupes, el estuvo conmigo todo el día… Fue algo bueno ya que…–      ¿Qué...? ¿Estuviste con él todo el día? –Dijo algo cortante.–      Si… Queríamos empezar desde cero, así que aprovechamos ese momento, èl es un buen chico, muy divertido y tonto.–      Eso dijiste de Zayn…
–      Si… Pero, no sé tal vez con Niall sea diferente. –Le dije algo asombrada por su respuesta.–      Pues espero que con Niall lo sea, no quiero que tengas los mismos sentimientos que por Zayn y el te rompa el corazón. –Ian seguía dándome contras a todo lo que decía parecía que me estaba molestando.–      Fui una estúpida por enamorarme de él… –Ian se quedo callado y después solamente se corto la llamada.

 Miré el teléfono molesta, ¿Qué le sucedía? Me había cortado… o ¿La llamada fallo?, puse el teléfono en su base y me volví a acostar, no entendía porque se había portado así, nunca había sido tan molesto conmigo, pero me alegro que se haya cortado, si seguía así posiblemente me hubiera molestado y por su tono de voz el igual, tal vez hubiéramos peleado o algo así… ¿Qué tuviera cuidado? Todo lo que acaba de pasar y él me recuerda a Zayn… ¿Qué le sucede?, como si… Yo fuera capaz de enamorarme de Niall…